CORONAVIRUS Y TURISTAFOBICAS.

CORONAVIRUS Y TURISTAFOBICAS.
Por Iván Oré Chávez. 24.03.2020
Estaba leyendo las redes y me tope de entre la infinidad de estupideces propias de las muchedumbres con este comentario emitido por una persona que se hace llamar Gabriela que se dice ser diplomada en ADEX y egresada de negocios internacionales por una Universidad en Lima Norte, en donde dice tener su barrio. Su comentario es esto: “Que estúpida la persona q escribe esto... No vez escaso se cerebro que los turistas y la gente media alta es la culpable de esto y es más indirectamente... Porque es un virus que está en todo el mundo... Deberían pensar antes de realizar este tipo de comentario. Gente ignorante”. Como vemos, tener todos los títulos que se muestran no quita lo ignorante. Hasta el más ignorante puede ser el más titulado. Veamos. Gaby dice trabajar en la Cámara de Comercio de Lima ¿no sabe la infinidad de eventos internacionales que se dan en dicha institución? ¿Ahí solo trabajan “pitucos”? Otra cosa más, cuantas personas en Lima Norte por su habilidad en los idiomas no se dedican al negocio del turismo, sea como guías u otra actividad con contacto con turistas? ¿Cuántas personas de los “conos” no trabajan en las casas de las “clases altas”? ¿Cuántas personas nada ricas de los conos se van a trabajar como nanas o domésticos a Europa? Es muy tonto creer que los ricos son culpables de la propagación del virus. Es un discurso típico de izquierda echar la culpa a los ricos, a esos mismos a quienes emulan en sus reuniones y modos de vida. Es mas ya que el virus esta en todo el mundo ¿Por qué el gobierno de facto, santificado por magistrados de facto y sostenido por la corrupta argolla oenégero caviar que mantiene en el poder al inquilino precario de palacio, no hizo nada para evitar la infección, teniendo en cuenta que esto era de conocimiento mundial? Como todos vieron, la orden de cuarentena (o catorcena) no se dio de un día a otro; mas correctamente se dio de una hora a otra, es decir ya estaba planeada de hace tiempo, pero era necesario sorprender a la gente, llenarla de miedo, y quitarle sus libertades. Yo no creo que este gobierno se preocupe por la gente. No me sorprendería que le interese mantenerse protegido por su inmunidad presidencial. Lo que si he visto es que a pesar del carácter internacionalmente público de la propagación del virus se permitió ingresar turistas sin el control sanitario debido, y se esperó a los primeros contagios para así tener la justificación incuestionable para tener a 30 millones de peruanos privados de sus libertades, lo cual da lugar a que las chusmerias se vuelvan más reticentes a cuestionar a su valentón político de turno, de quien depende un paternalista bono para que puedan subsistir, y quien ahora tiene bajo sus órdenes a un agente de seguridad en cada lugar estratégico de las ciudades del país. Lo que sigue es un elemento propio de los instintos básicos de las muchedumbres: arremolinarse alrededor de un incuestionable protector proveedor y tratar de no quedar mal con él no tanto por el cálculo de conseguir sus favores, sino por el miedo cobarde de ser objeto de su ira disfrazada de justicia como producto de su fáctica “interpretación auténtica” de la legalidad.