EL FIN DE UN DICTADOR ALTIPLÁNICO. PUEBLO FRUSTRA INTENTO GOLPISTA DE EVO.

EL FIN DE UN DICTADOR ALTIPLÁNICO. PUEBLO FRUSTRA INTENTO GOLPISTA DE EVO.

Por Iván Oré Chávez 12.11.2019 Facebook: @realbiopolitica

La casta oligárquica boliviana obtuvo el poder ininterrumpidamente desde que Bolívar decidiera crear un país en el Alto Perú y darle su nombre: Bolivia. El nuevo Estado se implementa cuan

do la Asamblea General de Diputados de las Provincias del Alto Perú aprueba el 11 de agosto de 1825 la Ley de Premios y Honores a los Libertadores cuyo primer artículo rezaba: “La denominación del nuevo Estado es y será para lo sucesivo República de Bolívar”. Posteriormente el uso común designó como “Bolivia” al nuevo Estado sin necesidad de modificar esta ley. Esta norma estuvo vigente hasta que la dictadura de la casta oligárquica boliviana tuvo que llegar a su fin debido a la coca, la cual dio lugar a otra dictadura, la dictadura castrochavista bolivariana bajo el mando de un dictador advenedizo que se ha hecho pasar por presidente indígena, cuyo nombre es Evo Morales. Los pueblos no despiertan, simplemente cambian de pesadilla.

Periodo 2006-2010. El 2006 con casi el 54 % de los votos, Evo Morales fue elegido presidente de la República de Bolívar. Fue el inicio de su dictadura. Pero la Constitución de 2004 establecía en su Artículo 87 que “El mandato improrrogable del Presidente de la República es de cinco años. El Presidente puede ser reelecto por una sola vez después de transcurrido cuando menos un período constitucional”. Primer obstáculo a superar.

En febrero del 2009 se una NUEVA CONSTITUCIÓN cambia el nombre a Estado Plurinacional de Bolivia, cuyo artículo 168 dice: “El periodo de mandato de la Presidenta o del Presidente y de la Vicepresidenta o del Vicepresidente del Estado es de cinco años, y pueden ser reelectas o reelectos por una sola vez de manera continua”.

Periodo 2010-2015. Gracias a esta acomodada Constitución el 6 de diciembre de 2009 Evo se reelige con el 64,22 % de los votos asumiendo su segundo mandato el 2010. Para ello, Evo había hecho creer a pueblo que no iba a perpetuarse en el poder. Por eso la sección II de la Primera Disposición Transitoria dice: “Los mandatos anteriores a la vigencia de esta Constitución serán tomados en cuenta a los efectos del cómputo de los nuevos periodos de funciones”. 

Periodo 2015-2019. Se supone que el 2015 acabaría su mandato, pero ahora Evo usó a su dócil Tribunal Constitucional para que haciendo uso de los argumentos más disparatados niegue su propia Constitución para así prolongar su nefasta dictadura de izquierda. Bajo el argumento de que “Se ha realizado la refundación del Estado como un Estado Plurinacional y esa refundación ha generado una nueva Constitución Política del Estado que contempla un nuevo orden" el Tribunal Constitucional se zurró en la propia Constitución. Para variar volvió a ganar en sus elecciones electrónicas del 2014.

PREPARANDOSE PARA EL 2020. Las bellacadas despóticas no dan marcha atrás. Convocó a un referéndum el 2016 para que el pueblo diga “si” o “no” a la siguiente pregunta: "¿Usted está de acuerdo con la reforma del artículo 168 de la Constitución Política del Estado para que la presidenta o presidente y la vicepresidenta o vicepresidente del Estado puedan ser reelectas o reelectos dos veces de manera continua?”. El pueblo dijo que no, con el 51% de los votos. 

Frente a esta derrota, Evo desconoció el mandato del pueblo recurriendo nuevamente a su servil Tribunal Constitucional, para que se inventara otro argumento ridículo con el cual pueda perpetuar su dictadura altiplánica. El Tribunal Constitucional sentenció en noviembre de 2017 que se estaban violando los derechos humanos de Evo Morales al limitar su postulación a dos periodos, es decir se le daba carta libre para eternizarse en el poder tumbándose varios artículos de la Constitución que obstaculizaban el plan del dictador altiplánico. La frescura de este dictador altiplánico es sumamente histriónica, puesto que en una entrevista declaró que no quiere postularse pero que lo hace para "no decepcionar a su pueblo". Que sacrificado.

EL FRAUDE.

Este 20 de octubre de 2019 se llevaron a cabo las elecciones. Y se descubrió por fin el porqué de las tantas victorias electrónicas del dictador. Los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) concluyeron categóricamente que “se falsificó firmas, se manipuló actas y también sistemas de transmisión de datos”, que “resulta improbable estadísticamente que Evo Morales haya obtenido el 10% de diferencia para evitar una segunda vuelta”. Sucede que Tribunal Electoral colocaba a Evo con 45% y a Mesa con 38%, es decir habría segunda vuelta, cuando de pronto de dio un “El parón de 24 horas en el recuento provisional oficial” y cuando se volvió al conteo, los resultados al 95% daban a Evo Morales el 47% superando por más de 10 puntos porcentuales a Carlos Mesa. Además el informe OEA explica que “El hecho de que hayan existido actas electorales quemadas evidencia la falta de resguardo, de previsiones adecuadas y poca coordinación de los TEDs con las fuerzas de seguridad. Dado que en Bolivia no existe la posibilidad de recuento de votos, el resguardo de las actas electorales es un aspecto crítico para dar las garantías al proceso electoral”. En conclusión La OEA concluye que “El equipo auditor no puede validar los resultados (..), por lo que se recomienda otro proceso electoral”. 

Ante tanto abuso y descaro, el pueblo se levanto contra el dictador y ante la negativa de las fuerzas de seguridad de reprimir sangrientamente a los bolivianos, Evo tuvo que dimitir. El carácter violento de Evo, el cual contrasta con su amistosa máscara mediática de cara a la galería, es común en este dictador inescrupuloso, su gobierno afronta un aproximado de 20 masacres sangrientas, para muestra: el Porvenir en Pando, a raíz del cual sigue preso político el Gobernador de Pando, la Masacre del Hotel las Américas en Santa Cruz con demanda de la Haya por muerte de extranjeros, la Masacre de la Calanche en Sucre, la Masacre de Cochabamba y antes de irse ahora han muerto dos bolivianos por francotiradores en Santa Cruz. Pero ya no le duraría mucho tener narcococaleros a su disposición para reprimir las protestas del oprimido pueblo boliviano. Tampoco existe un milagro económico altiplánico, eso es falsa propaganda de izquierda, si un peruano de 1,000 pasa a ganar 1,250 (25%), un boliviano pasa de 400 a 500. 

Una treintena de funcionarios Tribunal Electoral ya han sido detenidos por el fraude, entre ellos su vicepresidenta ha sido arrestada disfrazada de hombre y se espera que confiese quien dio la orden para el fraude que favoreció a Evo Morales. Obvia la respuesta.

La victoria del pueblo boliviano al derrocar a la dictadura bolivariana socialista constituye un heroico ejemplo para nuestro continente. El pueblo ha derrotado a los agentes del Foro de Sao Paulo y el Grupo de Puebla que buscan implantar el socialismo del siglo XXI, que en realidad es un nuevo despotismo burocrático y hambreador disfrazado de jactancioso populismo. Además nos deja como lección que la izquierda no aporta líderes, sólo vividores que se enseban a costa de la pobreza de los pueblos que logra timar. Evo ya fugó de Bolivia quizá recordando sus propias palabras: “quien se esconde o escapa es un delincuente confeso. No es un perseguido político”.